A pesar de la conciencia pública, nuestra mejor herramienta para la detección y el cribado –la mamografía– tiene un índice de falsos negativos de un 10%-25%, dependiendo de las series.
Cada año cientos de mujeres son diagnosticadas erróneamente “libres de cáncer”. Además, en algunas mujeres sometidas a tratamiento, la mamografía muestra limitaciones en cuanto a la capacidad de establecer adecuadamente el punto en que está la enfermedad. Por ejemplo, puede subestimar el alcance de un carcinoma lobular en hasta un 25% de los casos. Dadas estas circunstancias, la RM de mama se convierte en un complemento indispensable a la mamografía.
Desde la década de los ochenta, la RM ha sido una herramienta de gran utilidad en el estudio de numerosas partes de la anatomía humana, pero no ha empezado a utilizarse para la exploración de la mama hasta hace poco tiempo. El US Public Health Service Office on Women´s Health organizó una reunión hace menos de cinco años con el objeto de diseñar y desarrollar un plan para la optimización y evaluación clínica de la RM de mama. En ese momento, se
habían estudiado algunas áreas específicas de la RM, pero la principal conclusión a la que se llegó fue que la implantación de la RM de mama había sido lenta, y que había una necesidad imperiosa de crear una clasificación similar a la que desarrolló el sistema BI-RADS TM para la lectura de mamografías y sistemas de equipos específicos para la RM de mama.
Como se verá en el libro, el desarrollo de la RM de mama ha sido importante. La RM es ahora reconocida como la modalidad de imagen más precisa para la detección del cáncer de mama, ofreciendo claridad en muchas situaciones clínicas en las que el denso tejido mamario no se visualiza adecuadamente mediante una mamografía rutinaria o una ecografía. Ha resultado particularmente útil para detectar la fase en la que se encuentra un cáncer diagnosticado mediante biopsia, en especial el carcinoma lobular invasivo y carcinoma ductal in situ, los cuales históricamente no eran adecuadamente visualizados con técnicas convencionales. Es esos casos, la RM puede resultar útil para guiar tanto al cirujano como al paciente a tomar una decisión apropiada sobre la conservación de la mama frente a la mastectomía.